Durante el desarrollo de esta ruta interpretativa, se visitarán los enclaves de la marisma de Joyel y el encinar cantábrico del monte Cincho; a través de un sencillo recorrido se podrán analizar en profundidad los singulares ecosistemas que albergan estos lugares, atendiendo tanto a sus procesos de formación, como a sus dinámicas de funcionamiento. Así mismo, se atenderá a las comunidades biológicas presentes, profundizando en su composición específica y en su distribución sobre el terreno, que en el caso de la marisma, presenta un fuerte gradiente condicionado por el cambiante nivel de las aguas y la mayor o menor cercanía al mar, que propiciarán cambios en la humedad y concentración salina ambiental.
Además de lo anterior, los enclaves elegidos se encuentran en zonas muy influenciadas y transformadas por el hombre, lo que permite analizar nuestra incidencia como agente transformador del paisaje y sus componentes, así como la relación que se ha establecido con estos medios naturales a lo largo de la historia, llegando hasta la actualidad, donde la tónica general es la de recuperar estos ecosistemas gravemente degradados en muchos casos, para asegurar su conservación y funcionalidad para el futuro.