A pesar del incremento diagnosticado en los distintos estudios en la superficie de las masas forestales los últimos años en Cantabria, se ha dado una importante transformación en la gestión y uso de esos espacios, ya que muchos han pasado de estar ocupados por árboles y arbustos autóctonos a plantaciones de monocultivos.

Con esta actividad se pretende dar continuidad a la actuación llevada a cabo en el Monte Polvo, situado en el Valle de Villaverde, donde se hizo una plantación para combatir en cierto grado la gran presencia de plantaciones de pino y eucalipto, en la que el bosque autóctono se encuentra en estado de regresión y amenaza por dichos cultivos y por la actividad ganadera.

Con la eliminación de tubos y tutores, se demostrará el compromiso por seguir trabajando en una zona que además ha sufrido incendios recurrentes a los largo de los últimos años y por lo que es más importante que nunca el hacer este tipo de actuaciones de mantenimiento, conservación y mejora.

Además, se colocarán unas cuanta cajas nido para paseriformes, explicando la función de éstas, la importancia de las aves nidificantes en la zona y el estado de conservación en el que se encuentran.

Por último y con el compromiso que la Red Cántabra de Desarrollo Rural tiene en la lucha frente al cambio climático, también se desarrollará una actividad para calcular la huella de carbono derivada de la actividad y cómo se pueden trabajar medidas de mitigación y adaptación con este tipo de jornadas.