Durante la jornada se realizará un sencillo recorrido por diferentes parques de la ciudad de Santander, en el que se analizarán y compararán las diferencias existentes entre los enclaves elegidos. Así, a través del estudio de la configuración de los espacios, los materiales y sobre todo, las especies de fauna y flora presentes, ya sean ubicadas artificialmente o atraídas de manera natural por el enclave, se intentará determinar la potencialidad para la biodiversidad en cada caso. Finalmente, una vez sean analizados todos los casos, se podrá proponer un modelo deseable para estos espacios urbanos (desafío actual del urbanismo), que sirva no sólo como espacio de esparcimiento y ocio, sino que lo haga también como un ecosistema propiamente dicho, ya que en un planeta tan tendente a la urbanización, estos espacios bien entendidos se convertirán en otra herramienta para afrontar los desafíos del cambio climático, actuando por ejemplo como reservorios biólogicos, sumideros de carbono o purificadores del aire contaminado de las ciudades.